Equinox Fin de Semana

Notas de Felix Obes Fleurquin y del Semanario Equinox Fin de Semana de Uruguay

Sunday, July 27, 2008

Investigando en la Aduana




¡EL CIRCO PRESENTAAAA...!
Investigando en la Aduana



Sí, sí, ya sé que vos sabés que todo el circo que Astori, Mujica, Tabaré y el elenco del Circo Populista están haciendo con la Aduana es puro bla, bla, bla. Y que vos sabés que no van a lograr nada porque no quieren lograrlo, sino hacer juego de malabares para entretener a la gilada fiel que los vota y competir entre ellos en una pelea lateral de su carrera por la banda presidencial.

La Aduana está corrupta y en manos de mafias y sindicatos que digitan qué se hace y qué no se hace. La pavada de las coimas que siempre existieron para agilizar los trámites -lo sé porque fui importador- es un mal menor de un país de quinta como éste, porque en toda el área del mundo subdesarrollado, la cosa es así. Todos los despachantes lo saben, todos los gobernantes lo saben, por lo tanto, la estupidez del circo que el Poder Judicial hace por orden del Poder Ejecutivo, no engaña a nadie ni servirá para nada porque en nuestro subdesarrollo está implícita nuestra diaria corrupción y con ella tenemos que vivir. No es que me guste pero es así, estamos lejos de ser un país en serio; menos lejos que Argentina o Nigeria, pero malditamente lejos, que esas cosas pasen es tan normal como que se vendan números para el trámite rápido de sacar la cédula, como me contaba un amigo hace unos días.

Así que no seamos bananas, la gran joda de la Aduana no es esa, la que llena los titulares, sino la otra, de la cual ésta es la cortina de humo. Y es que la Aduana es un colador por el que pasan contenedores enteros que se venden en las ferias, por donde pasa toda la droga que los narcos quieren pasar. La DEA opina que no vale la pena perder el tiempo en coordinar con la Aduana y si la DEA opina eso, no hay más nada que hablar. Todos los anteriores responsables citados por los juzgados -faltaría citar a Bruno Mauricio de Zabala si seguimos así-, no es más que un mecanismo bien uruguayo de hacer muchos movimientos espectaculares para no llegar a nada.

Este circo no sólo es inútil sino que perjudica al comercio exterior, haciéndole perder el tiempo a los despachantes, a los importadores y a los exportadores, a toda la comunidad y a todo el país. Por lo tanto, debe cesar por no ser más que el resultado de una pulseada entre dos precandidatos que se quieren lucir con fuegos artificiales mojados. Está tapando la corrupción real, la gran corrupción a la que tardaremos en controlar el mismo tiempo que tardaremos en ser un país serio.

Hoy estamos lejos de serlo, muy lejos. Y si este gobierno lleno de ineptos y murguistas sigue gobernando el país, más lejos estaremos.

Por eso, mis queridos amigos, reitero, hay que sacarlos de una vez por todas.

Hasta la semana que viene.

Félix Obes Fleurquin
felixobes@gmail.com

Wednesday, July 16, 2008

Rabia gloriosa

UN EDITORIAL DANTON ROBES SAINT JUSTINIANO Y GUILLOTINANTE CON POCO FILO, COSA QUE LES DUELA A LOS BORBONES DE TODOS LOS TIEMPOS

Rabia gloriosa



Otro 14 de Julio, otra Bastilla destruida por un pueblo furioso y descontrolado, una marea de rabia republicana que ahoga en sangre a un régimen odioso. Y está bien, es justo, tenía que pasar y pasó, se abrieron puertas a patadas con resentimiento de años de injusticia, se violaron a hombres, mujeres y cabras, se derramó la sangre de justos y distraídos y sólo cabe lamentar los que estaban en lugar equivocado en mal momento. Usaron para esto la guillotina, que tanto separaba las cabezas de los ricos como la de los pobres ladrones. Y que se llevó la cabeza de un rey a la bolsa de cuero.

Una ola de rabia sacude a Europa en el año 1789 y hace pedazos una tiranía de siglos, a golpes de guillotinas y sables oxidados, guardados para un día de castigos, de horrores y de locura. Es mentira la versión inglesa de que todo se podía hacer por las buenas. La República, después de casi mil años de silencio y mentiras, no tenía otra salida que una Bastilla, un día de julio, de calor y rabia.

Una rabia que destruye el poder del clero, que jamás volvería a tener un poder ligeramente parecido. Una rabia que le dice no a los impuestos pagos por el pueblo y no por los señores, derechos y privilegios que mueren en una noche. Un día donde el ¡basta! de un pueblo se hace grito y acción, algo que deberíamos recordar y copiar, para acabar con estos privilegios de los feudales modernos travestidos en gobernantes.

La rabia gloriosa, la inundación de libertad de este 14 de Julio no da para otra cosa que festejar el nacimiento de la República, parida en medio del odio de los desposeídos contra los dueños de todo, los que serán guillotinados en buena hora en La Concorde, los que habían hecho de sus vidas una afrenta a la libertad que en este 14 de Julio será reconquistada duramente. Es un día de gloria, ha nacido una República y ella será esparcida por toda Europa en las mochilas del ejército de Bonaparte y el mundo nunca más será el mismo, porque se habrá destruido el concepto de jerarquías y privilegios de un régimen infame.

Como dice La Marsellesa, "A las armas, ciudadanos".

Reventemos Bastillas.

Hasta la semana que viene.

Félix Obes Fleurquin
felixobes@gmail.com

¡Beep Beep!


¡Beep Beep!
A la velocidad de la luz
El canto del correcaminos al que nunca alcanzó el coyote marca ACME



Luz que ilumina, encandila, quema,
chequea fallas en tu sistema,
las corrije en la bitácora de este viaje infinito.

Mientras tú miras por encima de tu hombro
en el puente de mando
y ves esa galaxia que se aproxima
en un choque inminente;

porque vamos a una velocidad que nos impide frenar a tiempo,
demasiado rápido,
casi a 300.000 años luz por segundo, que la fisica cuántica que no entiendo dice que no es real
casi cerca del límite que me gusta correr,
porque corriendo casi alcanzo la velocidad de la luz, casi
y en cada paso acelerando hasta casi perder el aliento,
siento la furia contenida de cada día,
esa furia llena de curiosidad que me ha hecho correr toda una vida,
que me hace correr.



Me gusta sentirla,
soltarla, jugar con ella,
porque en esa carrera interminable,
un juego contra uno mismo,
un reto,
aceleramos a la velocidad de una luz galáctica,
de una estrella
y por un pequeño, insignificante segundo,
somos luz
que todo lo ilumina y lo hace tan comprensible,
que nos decimos con sorpresa:
¿Cómo no lo habíamos visto antes?

En una deriva hacia el Cabo de Hornos, el Sur inalcanzable, mítico, destino de una migración que comienza con veleros y termina con naves fotónicas rumbo a Casiopea o Eridani, más allá de la Osa Mayor, mucho más allá del punto donde el infinito se hace una curva y la parada de un ómnibus galáctico lleno de humanos, etes y marcianos planchas, arturianos borrachos y soldados calaveras del tercio de Flandes y del ejército de Ming, una barrunta de hijos de las mil putas y padres sin nombre, acorazados en armaduras de acero de Toledo, cabalgando y arrasando la tierra que pisan, rumbo a una cruzada que terminará malamente en Macedonia en lugar de Tierra Santa.

Y corren y corremos todos, como el correcaminos perseguido por un estúpido coyote que compra cosas por catálogo, corren hacia el Sur pues no hay otra que hacia esa dirección, porque todos los barcos y naves estelares del universo y del barrio, las bañaderas y los camiones, los subterráneos de París y los de Buenos Aires, los micros de Santiago y los Greyhound de Alabama, todos corren y llevan tripulaciones al Sur.

¡Beep Beep!

Hasta la semana que viene.

Félix Obes Fleurquin
felixobes@gmail.com

Tuesday, July 08, 2008

Variaciones en invierno

Variaciones en invierno



Tenía varios temas para escribir esta semana, uno de ellos la sobredosis de Betancourt que, por suerte para ella, ha visto finalizado su secuestro pero que, por desgracia, una comunidad internacional bien pensante y deseosa de buenas noticias, ha tragado una "disneyniana" versión oficial de los hechos como cierta y ha lanzado iniciativas tan desproporcionadas, como nominarla a un Nobel, darle la Legión de Honor (reservada para los héroes de una Francia que hoy dista de ser la nación de Bonaparte y De Gaulle) y toda una sarta de excesos literarios bien intencionados, pero muchos de ellos oportunistas que han bastardeado una simple buena noticia.

Dicho esto, paso a otro de los temas que tenía en borrador y que era el de la necesidad de terminar con este gobierno, cuyo mayor defecto no ha sido la conculcación de las libertades -que no ha pasado nada y Uruguay es tan libre o tan sujeto a las arbitrariedades del poder como lo fue siempre y no hay ni habrá tanques rusos en la Plaza Independencia ni nadie se escapa en balsa del país- ni actos espantosos en materia económica o política -porque hay que reconocerle que ha sabido mantener las líneas básicas de un derrotero fijado antes de su arribo al poder-, sino su incapacidad para aprovechar el viento a favor y la riqueza generada por unas circunstancias excepcionales. No ha hecho nada para convertir a este país en una Gran Nación, rica y moderna. Por eso se debe ir y lo debe hacer derrotado democráticamente en la primera vuelta electoral, para que no deje el parlamento lleno de resentidos que impedirán al nuevo gobierno hacer lo que Uruguay debe hacer.

Creo yo que hay que votar teniendo esto en cuenta: el partido y el candidato que presenten mejores chances para derrotarlo. Si se hacen cálculos mezquinos de ganar en la segunda vuelta, se estará sembrando el futuro descalabro del país, porque estos derrotados harán todo lo que en sus manos esté para impedir un gobierno razonablemente bueno. Yo voy a votar al Partido Nacional, aún con reparos en sus candidatos, porque es la herramienta que hay a mano para intentar lograrlo.

Dicho esto por enésima vez, punto al tema. Cada cual será responsable de lo que suceda al país en el próximo período si hace cálculos en chiquito, sin pensar en un panorama que favorezca al interés general, dejando de lado partidismos genéticos y reparos de tradición y gustos personales.

Pensaba también hacer una nota referida al 14 de Julio, fecha no sólo de Francia sino de la Democracia Occidental; pensaba escribir sobre la "rabia gloriosa" de ese día de verano que en París encendió una hoguera que arrasó con el antiguo régimen y una forma de ver el mundo que tanto detesto. Sé los bemoles del asunto, las crueldades del episodio y lo que se ganó y perdió en cada etapa del doloroso proceso de dar a luz a la república perdida que había nacido en Grecia y preservada en Roma parcialmente, pero que Occidente tenía que adoptar para volver a los orígenes; porque Occidente es republicano, democrático y liberal y no hay ninguna otra opción de sociedad que permita vivir y prosperar con cierta libertad y felicidad.

Así que dicho lo anterior, paso punto y les recuerdo que este lunes próximo, 14 de Julio de 2008, estamos festejando un día de gloria republicana.

También tenía en la canasta de ideas escribir una nota de esas bien cursis y familieras, en las que la cholulez paterna me sale por la punta de los dedos, a propósito del Día del Padre; pero voy a pasar de largo ya que lo festejaré en republicana modestia, sentado en la cabecera de la mesa del almuerzo del domingo 13, lugar que he heredado de mi padre como él lo heredó del suyo y así desde el comienzo de los tiempos, para desde ese lugar que me corresponde por mi condición, mirar a mis hijos presentes, a mi nieta y extrañar a los que están fuera del país, como vamos a hacer todos los padres de Uruguay ese mismo día a la misma hora, con la misma sensación de satisfacción y orgullo.

Pero voy a terminar escribiendo y ahí va, de lo que estoy viendo en este momento, martes 8 lleno de luz invernal, mientras miro al norte por la ventana de Equinox y veo una ciudad verde y hermosa, los techos rojos del Pereira Rossell que se parecen a los de Florencia vista desde el otro lado del Arno, con una enorme chimenea de ladrillo que podría ser un campanario renacentista o una torre de una mansión de Verona; así lo imagino yo, que tengo el placer de viajar continuamente sin tener que moverme de mi querida ciudad, en la que he nacido y en la que, si se me concede la gracia, he de terminar esta vida que disfruto en cada buen momento y en los malos, en los que trato de convertir, por una especie de alquimia, un momento de tránsito a mejores situaciones.

Hay un curioso silencio de repente en la ruidosa calle Rivera; quizás porque el abuso de años de walkman y MP3 me están dejando sordo o quizás porque mi buen humor ha filtrado esos ruidos y me permite escuchar el sonido del viento en los plátanos enormes de la vereda o el sonido lejano de un campanario de esa iglesia ahí cerca. Aprovecho ese silencio y esta luz que ilumina las palmeras, que da brillo a las hojas de mi plantación de salvia en el balcón, para recordarme que hay momentos en que las cosas pequeñas y cotidianas como ésta, el tesoro que tenemos a nuestro alcance y por lo que no hay que ir a Cracovia o a Praga para encontrarlo, son las cosas más disfrutables de la vida, por el solo hecho de estar vivos y respirando este aire cálido de las cuatro de la tarde.

Y punto, hasta la semana que viene.

Félix Obes Fleurquin
felixobes@gmail.com

Friday, July 04, 2008

EL IMPUESTO A LA BOLSA Y A LOS CONDONES Y PAÑALES


Una mezcla de estupidez, mezquindad y rapacería



"Tasa a bolsas de nylon no soluciona el problema de la contaminación. Blancos, colorados y supermercadistas criticaron la tasa que la Intendencia aplicará a las bolsas de nylon y los envases descartables. Señalan que no soluciona la contaminación y que se transformará en un nuevo impuesto municipal."

Este gobierno es inefable, se le ve la hilacha en cada cosa que hace, es un gobierno que gasta, como un atorrante que ganó la lotería, los fondos públicos en planes cuyo único sentido es juntar votos de el lumpenaje y nada más. Por el otro lado es ratón, mezquino, garronero y rapaz. Trata de meter la mano, de robarnos la plata -como sea-, de castigar a la industria y al comercio con leyes y decretos de una imbecilidad rampante, como éste, "el impuesto a la bolsita", que también se podría poner a los condones, a los globos, a los pañales geriátricos en una especie de IRPF a la caca del jubilado, ¡total ya lo están robando! Un palo más, ni lo sentirá.

La contaminación no se soluciona con esto, pasa por la educación, por la lucha contra la pobreza y el fomento a la riqueza, ya que siendo un país pobre, tercermundista que se cree más de lo que es, la contaminación está generada por un ciudadano que es básicamente un cerdo sin distinción de clases sociales y por los lumpen que viven, literalmente, entre su propia basura y son manejados por las mafias que trafican con los desperdicios y que son los que presionan a los gobiernos para que no resuelvan el tema de los carritos.

El impuesto a las bolsas es tan pero tan estúpido, que le mata el punto a aquella estupidez de hace años, del impuesto a las mascotas, que era una joya de la rapacidad oficial, en ese entonces colorada; este impuesto que no está pensado para ayudar a luchar contra la contaminación sino para tener más dinero para pagarle a los atorrantes que desde el sindicato fascista de la IMM la manejan a su antojo y nos cuestan millones de dólares, que pagan principalmente los retardados que siguen votando al Frente para la Intendencia. Sí, si estás pensando que hablo de ti, que los votaste varias veces, sí, me refiero a ti, sos un tarado sin remedio.

La contaminación es un producto de la pobreza y acá el Estado, no lucha contra ella sino que la fomenta, permitiendo que los lumpen no trabajen y les paga por eso; fomenta que esas reventadas en las esquinas queden embarazadas una y otra vez, para cobrar por cada hijo; fomenta todo aquello que no genera riqueza, la mugre y el desánimo; y, a través de el castigo sistemático al que produce y al que más tiene porque más ha trabajado y más se lo merece, fomenta que la gente baje los brazos y le importe un carajo la contaminación. El ecologismo y la responsabilidad social son productos del estado de bienestar, no del estado de desánimo que ha creado este gobierno rapaz, ratón, mezquino e incapaz.

Por eso, el impuesto a las bolsas, que en un contexto de crecimiento y riqueza sería quizás una de las formas de fomentar el uso de materiales reciclados o ambientalmente amistosos como el papel, en este momento, con un gobierno que todos sabemos que es tan corrupto desde el primer cargo al último, tan rapaz y ladrón como cualquiera o más; tan incapaz de establecer políticas que generen riqueza. En estas circusntancias, es la penosa demostración de la capacidad de los funcionarios de buscar más dinero con cualquier excusa, en este caso, manoseando un tema loable y convirtiéndolo -al revés del Rey Midas que todo lo que tocaba lo convertía en oro- en una cagada, así, literalmente y sin eufemismos, porque todo lo que este gobierno toca, lo hace mierda.

Así clarito, por si no entendieron.

Hasta la semana que viene.

Félix Obes Fleurquin
felixobes@gmail.com