Equinox Fin de Semana

Notas de Felix Obes Fleurquin y del Semanario Equinox Fin de Semana de Uruguay

Tuesday, October 28, 2008

JOHN ADAMS EN HBO


EL NACIMIENTO DE LA REPUBLICA

Hora de Uruguay: Lunes 23 horas, martes 2120

Imprescindible





http://www.elmundo.es/elmundo/2008/09/03/asesinoenserie/1220426406.html

Si me das un minuto de tu tiempo


A mi hija Leticia



Si me das un minuto de tu tiempo


Quizás te escriba algo que te guste y que te haga pensar en esas cosas que suceden a diario más allá de ti, esas cosas simples, hojas que nacen en los árboles en esta primavera, sonrisas en fotos viejas de familia, esas fotos en blanco y negro de cámaras cúbicas que por arte de magia dejaban a papá y mamá, al tío y a los primos y aquella reunión de familia inmortalizada y estática por todos los siglos, como si hubiéramos vivido en sólo dos tonos.

Si me das un minuto, es probable que a esta altura, con todo lo que he acumulado, pueda escribir algo que te llame la atención, que te haga pensar de otra forma, que te haga reír de ti misma, que haga que no tomes todo en serio y, lo que es más importante, que no te tomes a ti misma en serio, porque no hay nada peor que creer que las estupideces que uno dice cada tanto son verdades irrefutables.

Uno nace y crece y muere espléndidamente idiota y a medida que se avanza en la carrera hacia el inevitable final sin pena ni gloria, bajo este sol inmenso, tenemos la suerte de darnos cuenta que nada es en serio, que nada es como habíamos creído, que, por suerte, todo estaba equivocado y eso es lo que nos permite, aunque sea tarde, tener una parte de la sabiduría, de las certezas, de las verdades, de las cosas que no sabíamos.

Eso es bueno.

Si me das un minuto más, seguramente te diga que no hay nada peor que una vida de quejas, de rencores y reproches de cosas que no fueron, porque el solo hecho de haber vivido y estar vivo es un milagro, porque el solo hecho de respirar, de ser, de no estar en silencio, es una maravilla y eso es bueno, estás viva y es bueno. Estar vivo y quejoso, jodiendo con tóxica personalidad plañidera que tienen muchos que se ahogan en sus estupidas rutinas, en sus rencores, en sus pequeños odios y temores, no es bueno; hay que hacer todo lo que el tiempo en este tránsito te permita; porque hay solo una oportunidad y nada más.

Y si me das un minuto más, seguramente puedas hacer como yo, de enamorarte del solo hecho de estar viva, una única oportunidad de ser un genio, un sabio, un idiota, un gil, un poeta, una madre, lo que desees hacer, pero por una sola vez.

¿No te parece qué eso es fantástico?

Friday, October 24, 2008

Rockanrolla



Rockanrolla
http://rocknrolla.warnerbros.com/



Iba a escribir de otra cosa, estaba en borradores mentales que quedarán para más adelante, ya que tuvimos en casa una semana complicada de salud y esas cosas que aparecen como ráfagas de viento frío en un día normal y te sacan del carril; pero ya está, la vida es eso, una serie interminable de imprevistos que deshacen o cambian los planes mejor trazados y si no, preguntale a los corredores de Bolsa y a los apostadores de las acciones esas que son papeles con precios inventados en algun rincón oscuro.

Y fui al cine, con una invitación que un grupo de amigos me hizo, al Festival de Montevideo o algo por el estilo que había escuchado de pasada y no registrado debidamente por la tensión de la semana. Y eligiendo entre las muchas películas que había para ver, todas de cine independiente del que me gusta más pero de nombres desconocidos, me dicen de una, "Rocakanrola" y me sonó algún timbre en el cerebelo de algo que había escuchado o leído. Me dicen que era de un tal Ritchie, Guy, ex marido de Madonna, que siempre usa maridos inteligentes y que valen la pena (Sean Penn es otro) y me sonaba el nombre y me dicen: "Es del director de Cerdos y Diamantes", un policial negro, negrísimo espectacular que vimos con Maxi hace años y del que voy a hacer una nota la semana que viene y a él mismo, a esa película que no podía ser light ni una boludez deprimente tipo Mamma Mia, que no voy a ver ni que me dopen.

Y salimos a verla.

Intenté buscar datos en Internet pero hay poca cosa, salvo alguna mención. Puede ser porque es tan nueva que no haya llegado a las salas del norte o quizás -y es más seguro- porque es demasiado buena para el mercado de cine basura que llega a las grandes distribuidoras. No sé, hace una semana vimos con Maxi una película de Lumet, "Antes que el diablo sepa que estás muerto", que lo mejor que tiene es el título y que, pese a que está técnicamente bien hecha, salís del cine para suicidarte porque muestra toda la basura del mundo junta, como si eso sólo fuera la vida. Es mala no en el sentido de mal hecha, es mala porque es una visión vieja y resentida de la vida y me recago en Lumet. Sin embargo, Rockanrola es una película con humor, humor violento y negro y jodidamente bueno, porque siendo una película de ladrones, mafiosos rusos, ingleses, putas finas, maricas y drogadictos, asesinos, es una máquina de mover el cerebro, explotando todos los malditos recursos que un buen director puede usar si es un tipo mentalmente joven que se ría de sus personajes y que haga que estos, entre crimen y crimen, se diviertan y diviertan al espectador mientras corre sangre, droga, balas y puñaladas surtidas a un ritmo loco, absolutamente de rock y demencialmente brillante.

Esa película me salvó una semana oscura y en un par de horas me la convirtió en esta noche de verano, la primera de la temporada, en una experiencia alucinante que deja una secuela prometida en los créditos finales, porque los personajes -One Two, Mumble, Bob, Cookie y el genial Tom Wilkinson como mafioso de quinta, pelado y grasoso- van a volver aún después de muertos, se toca el tema de que se gana más guita con un rockero muerto que con uno vivo entre otros mil temas, en otra película cuyos orígenes están en Cerdos y Diamantes.

Si sos cuadriculado y te gusta el cine lineal, estúpido y estilo Cinecanal Classics o Retro, ni se te ocurra verla. Pero si aún en la edad que tengas, tenés la edad mental apropiada para sorprenderte y reírte de todo este siglo espléndidamente loco y delirante, si te gusta más Boogie que Inodoro Pereyra, si disfrutaste con Sin City y la entendiste, no te la pierdas, loco, es impresionante.

Abrazo y seeyoulater...

Bocha

Thursday, October 16, 2008

¿Cuánto se necesita para ser feliz?




¿Cuánto se necesita para ser feliz?



Hoy estaba hablando con un par de lectores de Equinox y el tema que salía en forma inmediata era el del lío financiero que nos tiene a todos expectantes; porque dejando de lado detalles técnicos que no entiendo y de los que sabios e idiotas por igual han metido su opinión, es, sin duda por la ola que ha creado, el tema del día.

No voy a meter cuchara, admito que el tema me queda grande, me es ajeno, nunca supe de acciones, productos intangibles o inversiones financieras, porque el dinero que tuve lo gané vendiendo y comprando cosas tangibles, tengo alma de almacenero, no de financista. Pero lo que veo, sospecho en todo esto es una carrera loca para tocar el cielo, como si eso fuera posible y fuera real la frase de "El cielo es el límite", que no lo es, ya que hay un límite para todo y existe un castigo automático a la ambición desmedida, es sabido esto desde los comienzos de nuestra civilización. Desde Grecia, hace miles de años que los dioses de esa época, que eran más humanos que los de hoy y reflejaban nuestra máxima humanidad -que para eso los inventamos- tenían una denominación, la de "Hibris" o sea:

"La hibris o hybris (en griego húbris) es un concepto griego que puede traducirse como 'desmesura' y que en la actualidad alude a un orgullo o confianza en uno mismo exagerados, resultando a menudo en merecido castigo. En la Antigua Grecia aludía a un desprecio temerario hacia el espacio personal ajeno unido a la falta de control sobre los propios impulsos, siendo un sentimiento violento inspirado por las pasiones exageradas, consideradas enfermedades por su carácter irracional y desequilibrado y, más concretamente, por Ate (la furia o el orgullo). Como dijo Eurípides:

'Aquel a quien los dioses quieren destruir, primero lo vuelven loco.'

La religión griega ignoraba el concepto de pecado tal como lo concibe el cristianismo, lo que no es óbice para que la hibris parezca la principal falta en esta civilización. El castigo a la hibris es la Némesis, el castigo de los dioses que tiene como efecto devolver al individuo dentro de los límites que cruzó. Herodoto lo expresa claramente en un significativo pasaje:

'Puedes observar cómo la divinidad fulmina con sus rayos a los seres que sobresalen demasiado, sin permitir que se jacten de su condición; en cambio, los pequeños no despiertan sus iras. Puedes observar también cómo siempre lanza sus dardos desde el cielo contra los mayores edificios y los árboles más altos, pues la divinidad tiende a abatir todo lo que descuella en demasía.'"

En mi opinión, ha habido una ambición desmedida sumada a una falta de control del Estado, una de cuyas funciones, en mi liberal visión del mundo, es la de controlar que el normal deseo de lucro de los particulares no se salga de madre y afecte al total de la comunidad. Véase que toda esa chillería de los idiotas social comunistas y sus cretinos útiles, de que el capitalismo está en caída, en una soberana estupidez ya que el capitalismo, el derecho de propiedad, la libertad económica y aspirar a más bienes son tan naturales a la humanidad, como aberración de la naturaleza es la negación de esto -lo que está muerto es el comunismo y todos sus modelos orientales anticapitalistas desde el de los persas, los incas, hasta el de los soviéticos- pero como digo en el título y nos enseña el sentido común, ¿cuánto más poder y riqueza se necesita para ser feliz sin caer en el exceso y ser castigado o no tener tiempo en la vida para disfrutarlo?

Me gusta el dinero, me gusta la riqueza y me gustaría ser rico y vivir sin preocupaciones, porque eso es hermoso; y vivir mal, pagando en cuotas y mirando si llegas a fin de mes es detestable y es malo y feo, pero pienso que muchos de los que hoy lloran y muchos de los que hoy han puesto en peligro las vidas de las gentes de a pie, han jugado de más y por ambición desmedida y han pecado en el sentido griego de la desmesura. Serán castigados, pero también caerán muchos para ellos "víctimas colaterales", que no han sido jugadores de esa timba global.

Ahora, lo que me queda claro es que el capitalismo, siendo un estado natural de la civilización -y la civilización es Occidente y éste es el motor de la humanidad- no está muerto ni ahí, puras pavadas y mala onda de quienes creen por idiotez que están fuera de ese sistema, ya que todos en el planeta hoy día, desde los papúas a los uruguayos, estamos insertos en un mundo capitalista, único global y perfectible, porque caídas las repúblicas de Grecia, caída Roma, caído o disminuido el Imperio Británico, siempre ha habido y habrá un relevo para la combinación exitosa de república, capitalismo y libertad individual que nos ha hecho como sociedad, como individuos dentro de ella y, gracias a la habilidad de cada uno, seguir adelante conquistando espacios, cada vez que ello ha sido necesario.

Así que, a ser cautos pero bajemos la pelota al piso, el mundo no ha dejado de girar.

Hasta la semana que viene.

Félix Obes Fleurquin
felixobes@gmail.com

Saturday, October 11, 2008

Aztecas, griegos, Alejandro Magno, Adolfo Hitler & nazis comunistas y persas



La ensalada del sabado de noche

Aztecas, griegos, Alejandro Magno, Adolfo Hitler & nazis comunistas y persas

Hola gente. Esta semana mi hija mayor se lleva el espacio que llamamos "Editorial" y yo que ando haciendo trabajo de ventas pagar las cuentas, seguir abierto -esas maravillas del libre mercado que acá en Uruguay funcionan para los particulares o privados- he seleccionado un par de textos de dos libros que estoy leyendo; el primero, el que sigue a esto, del tomo 2 de "Criptonomicon" de Neal Stephenson, un diálogo que me hizo ver el episodio de la conquista de América, tal cual yo lo pienso, nada de acuerdo con esa versión políticamente correcta hoy día, de que los malvados europeos cayeron como bestias a escabechar a unos indios que vivían al estilo de "el buen salvaje" que nunca fue bueno ni malo, sino salvaje y humano.



A muchos no les ha gustado la película "Apocalyto" de Gibson, a mí sí, porque rompe con el esquema de que acá era el paraíso en la Tierra antes de la llegada de nosotros, los conquistadores europeos que por humana lógica, nos estábamos expandiendo en busca de tierras y alimento, tal como lo hacen todos los seres vivientes desde las bacterias hasta los turcos, pasando por las hormigas y los virus, que somos todo lo mismo -ADN más o menos complejo, pero ADN al fin- con patas, alas, esporas, pero ADN y chau.

Y expandiéndonos nos dimos de cara con estos indios y resulta que éramos más eficientes en el arte de la guerra, que de matar se trata y robar lo que el otro tiene, porque no hay expedición de bantúes, chinos, otomanos, irlandeses o mayas que haya salido de su territorio en busca de más, que lo haya hecho con el ánimo de repartir caramelos.

No digo que sea bueno ni malo, es así, de esta manera es el Universo y por eso, hasta que nos encontremos como civilización con quienes sean más eficaces en el arte de la guerra, la cosa será así.

DE CRIPTONOMICON
de Neal Stephenson

"...aztecas siglos antes de que apareciesen los españoles. ¿Sabes qué hicieron esos cabrones de los aztecas, Randy?

Randy usa las manos para limpiarse el sudor de la cara.

-¿Algo inenarrable?

-Odio la palabra «inenarrable». Debemos narrar esos actos.

-Narra entonces.

-Los aztecas hicieron veinticinco mil prisioneros de Náhuatl, se los llevaron a Tenochtitlán y los mataron en un par de días.

-¿Por qué?

-Una especie de festival. El fin de semana de la Super Bowl o algo así. No lo sé. Lo importante es que cometían continuamente cabronadas como esa. Pero ahora, Randy, cuando hablo de acontecimientos como el Holocausto en México, ¡me ofreces esa mierda sobre los desagradables y cabrones españoles! ¿Por qué? Porque se ha distorsionado la historia, ese es el porqué.

-No me digas que vas a tomar partido por los españoles.

-Como descendiente de personas expulsadas de España por la Inquisición, no me hago ilusiones con respecto a ellos -dice Avi- pero, en sus peores actos, los españoles eran un millón de veces mejores que los aztecas. Quiero decir: realmente habla muy mal de los aztecas el hecho de que cuando los españoles aparecieron por allá y lo destrozaron todo, las cosas mejoraron un montón."

DE "MATANZA Y CULTURA"
de Victor Davis Hanson

En este otro libro, comprado en Buenos Aires, que aún estoy leyendo y del que seguro van a recibir más notas al respecto, está ese concepto de superioridad militar de Occidente, establecido desde la polis griega, donde los cien mil de Jenofonte & Cia. sobrevivieron a su aventura por su forma de pensar el mundo -eran una república en marcha, ya la semana pasada o la otra publiqué algo de eso- que de haber sido 100.000 persas en territorio griego, no lo hubieran logrado. Es verdad lo que dicen las imágenes del cómic "Los 300", que los persas iban al combate a las patadas en el culo, como iban los rusos en Stalingrado donde murieron tantos rusos a manos de sus jefes como por arte de los alemanes; mientras que los griegos, en la mayor parte de las guerras y luego los occidentales, peleaban voluntariamente o en base a un contrato, esa capitalista forma de ver el mundo que es uno de los elementos del éxito.

Nada de buenos y malos, esos son conceptos que no hacen a la realidad de los hechos.

En este libro fascinante, una caja de Pandora de ideas nuevas, encontré esto que sigue, en donde -y la verdad, recién lo veo así- Alejandro Magno fue una calamidad para Occidente en la interna griega, que los conceptos de república, libertades y consenso tuvieron que ser rescatados luego en Roma. Pero militarmente sí nos hizo un enorme favor: destruyó al Imperio Persa que nos estaba amenazando y con el que Grecia -es decir, nosotros- teníamos una cuenta pendiente. Debemos darle las gracias por eso, de lo contrario, lo que somos hoy jamás hubiera sido posible.

La comparación de Hanson de Alejandrito con Adolfito me dejó estupefacto, admito, no se me hubiera ocurrido nunca.

Siempre dije que la Alemania nazi y la Unión Soviética eran igualmente criminales, pero que esta última era peor porque había empezado su genocidio antes y lo había seguido después del fin del nazismo, una con motivos raciales, la otra con motivos de clase, pero ambas genocidas. Y que la Segunda Guerra había sido un enfrentamiento entre dos bestias, con la participación secundaria de Occidente. Ganó la bestia roja, fue el principal ganador de la guerra y medio mundo civilizado hubo de esperar con paciencia hasta 1989, cuando Europa del Este, sumergida en la brutalidad comunista, pudo ser lo que es hoy y volver a Occidente.

Nada más.



"La época helénica (323-31 a.C.) comenzó con la destrucción de la libertad y de la autonomía política griegas a manos de Alejandro. Su introducción de la cultura militar griega al otro lado del Egeo y el estímulo económico que supuso la inundación de Grecia con el oro y la plata de los tesoros imperiales de Persia, que hasta el momento habían permanecido almacenados y sellados, alentaron la opresión política y la disparidad económica, aunque atrajeran a escritores y artistas a las nuevas cortes de la época. Allí donde había habido polis griegas autónomas, dejó monarquías explotadoras, que no obstante se basaron en las tradiciones occidentales del racionalismo y el aprendizaje interesado para crear ciudades, obras artísticas de envergadura y una agricultura y un comercio muy sofisticados. En el mundo de Alejandro no había espacio para patriotas y políticos, pero los sabios y los artistas tenían mucho más oportunidades y dinero que en el pasado.

Pese a su devoción por la cultura griega, cuando murió, Alejandro era el hombre más parecido a Jerjes que a Temístocles. Bajo las dinastías helénicas que le siguieron, la milicia de ciudadanos dejó paso a los mercenarios y la guerra consumió presupuestos y mano de obra en cantidades astronómicas. La libertad de mercados, la investigación en tecnología militar y la mejora de la logística se combinaron para crear unos ejércitos occidentales inimaginables algunas décadas antes. La idea oriental de un rey divinizado se convirtió en norma en los Estados de los diádocos, con sus acostumbradas megalomanía, opresión y muertes gratuitas, que todos asociamos con las teocracias. Algunos estudiosos equiparan a Alejandro con César, Aníbal o Napoleón, con quienes compartían una voluntad de hierro, un genio militar innato y la búsqueda de un imperio más poderoso de lo que los recursos naturales de su tierra nativa les permitían. Alejandro, en efecto, guarda afinidades con todos ellos, pero a nadie se parece más que a Adolf Hitler, comparación repulsiva que sin duda ha de sorprender e incomodar a la mayoría de especialistas en cultura clásica y filohelenos.

Hitler también ideó y llevó a cabo una brillante pero brutal marcha hacia el este en el verano y el otoño de 1941. Tanto él como Alejandro eran singulares genios militares occidentales conscientes de que sus cuerpos móviles o tropas de choque no tenían parangón en el mundo. Ambos fueron aclamados como místicos y, aunque los movía el saqueo y la rapiña, adoptaron la apariencia de emisarios que trasladaban al este la "cultura" occidental y se proponían "libertar" a los pueblos oprimidos de un imperio asiático centralizado y corrupto. A los dos les gustaban los animales, trataban a las mujeres con gran deferencia (aunque a ninguno de los dos les interesaban realmente), hablaban de su propio destino y divinidad y podían mostrarse muy corteses con sus subordinados pese a que planearon la destrucción de cientos de miles de hombres y finalmente mataron a muchos de sus ayudantes más próximos y de sus mariscales. Ambos eran filósofos populares semiinstruidos que salpicaban sus órdenes de destrucción en masa de alusiones literarias. Por cada promesa de "hermandad del hombre" hubo un "Reich milenario"; por cada casa de Píndaro salvada de las ruinas de Tebas, sueños de una nueva Roma en Berlín, por cada Parmenión destripado, un asesinado Rommel; por cada asolada Tiro, Gaza Sogdiana, una Varsovia o Kiev arrasada y por cada desierto de Gedrosia, un Stalingrado suicida.

De igual modo que Alejandro comprendía que el individualismo europeo y los conocimientos y experiencia del helenismo podrían forjar un ejército de elevada moral y por tanto servir a una autocracia temporal, Hitler aprovechó el rico legado de Alemania y de su antaño libre ciudadanía para crear una igualmente dinámica y temible guerra relámpago. La historia llama a Alejandro emisario del gobierno mundial y visionario, al tiempo que, con justicia, considera a Hitler un monstruo depravado y mortífero. Si Alejandro hubiera muerto en el Gránico, nada más entrar en Asia (un jinete enemigo estuvo a punto de partirle la cabeza en dos) y los panzers de Hitler no se hubieran quedado atrancados a kilómetros de Moscú en diciembre de 1941, algunos historiadores considerarían al macedonio como un megalómano desequilibrado cuya insana ambición terminó en un pequeño río próximo al Helesponto; y al dictador alemán un salvaje pero omnipotente conquistador que mediante brillantes y decisivas batallas derrotó al brutal imperio comunista de Stalin.



El fracaso de estos dos autócratas -el imperio de Alejandro se desintegró en belicosos feudos antes de caer en manos de Roma, mientras que el Reich milenario de Hitler duró tan sólo trece años- nos recuerda que la superioridad tecnológica, el concepto de batalla decisiva, el capitalismo y la disciplina sólo confieren a los ejércitos occidentales victorias efímeras cuando les falta el correspondiente cimiento de libertad, individualismo, control ciudadano y gobierno constitucional de Occidente. Debido a la complejidad y orígenes de la doctrina militar occidental, no hay duda que resulta más eficaz cuando se ve confinada a los parámetros que le dieron el ser. No hubo en la Antigüedad hombre más valiente en lo personal, brillante en lo militar y abyectamente criminal, que Alejandro, el antiheleno, el primer conquistador europeo de una larga lista."

Así nomás. Los espero la semana que viene, reciban un abrazo.

Félix